"Durante cuarenta años nos dice Juan Villoro en el prólogo Herralde ha dirigido su editorial, Anagrama, con el intrépido placer de quien organiza una fiesta en una país con toque de queda". Y sobre los preparativos y los invitados de este convite nos habla su organizador en El optimismo de la voluntad: un collage de homenajes a autores y editores "Sergio Pitol, Carlos Monsiváis, Ricardo Piglia, Roberto Bolaño, Mario Muchnik, Arnaldo Orfila, entre otros", además de notas sobre la experiencia de editar en el contexto latinoamericano. Como recuento histórico la obra es imprescindible y como lectura es uno de los libros más memorables que se hayan escrito sobre el tema.